Imagar es una consultoría informática especializada y proveedores de servicios informáticos. Sabemos que cada empresa es diferente, por eso las opciones que necesita también lo son. En la mayor parte de las ocasiones es aconsejable que cuenten con un software personalizado. Nuestros profesionales trabajan con la tecnología más vanguardista para proporcionar las soluciones que se adaptan a las necesidades particulares de cada cliente.

¿Qué es el software personalizado?

Podemos definirlo como aquel que se desarrolla específicamente para una empresa o cliente, con el objetivo de satisfacer sus necesidades y requerimientos particulares. A diferencia del software comercial o pre-fabricado, que se desarrolla para una audiencia general y no se adapta a las necesidades específicas de una empresa, el personalizado tiene en cuenta la idiosincrasia y los mecanismos de funcionamiento de cada organización.

Por supuesto, el software personalizado suele ser más completo y exigente que el software comercial o pre-fabricado, debido al tiempo y los recursos necesarios para desarrollarlo. Sin embargo, puede ser una mejor opción para las empresas que tienen necesidades específicas que no pueden ser satisfechas con un software pre-fabricado. En ocasiones, este tipo de programas pueden ser una adaptación de otros software comerciales o ser desarrollados ex profeso.

Además, suele integrarse con los sistemas y aplicaciones existentes de la empresa, para maximizar la eficiencia y reducir la duplicación de esfuerzos. Se trata de un tipo de programas que se pueden escalar y adaptar a los cambios en las necesidades de la empresa. Uno de sus puntos fuertes es que el software se diseña y desarrolla teniendo en cuenta las necesidades de seguridad de la empresa, lo que reduce el riesgo de vulnerabilidades y ataques.

Cómo es el proceso de desarrollo de este software

El desarrollo de un software personalizado se realiza a través de un proceso conocido como el ciclo de vida del desarrollo de software. Este proceso incluye varias fases que podemos resumir así:

• Análisis: En esta primera fase, se entrevista a los usuarios y se investiga sus necesidades y las peculiaridades del negocio para entender sus requerimientos. El objetivo es determinar qué problemas tiene la empresa y cómo el software personalizado puede ayudar a resolverlos.
• Diseño: Una vez realizado un análisis minucioso viene la fase creativa. En esta fase, se crea un diseño para el software. Se determina cómo el software se comportará, es decir, qué funciones es preciso que realice y también su apariencia. Además se especificarán los requerimientos técnicos necesarios para su desarrollo.
• Desarrollo: En esta fase, se escribe el código y se integra con otros sistemas y aplicaciones existentes de modo que formen un conjunto orgánico.
• Pruebas: En esta última fase de desarrollo, se prueba el software personalizado para asegurar que cumple con los requerimientos especificados y que está libre de errores como paso previo a su implementación en la empresa.
• Implementación: En esta fase, se instala y configura el software personalizado en el ambiente de producción y también se capacita a los usuarios para que lo utilicen.
• Mantenimiento: Una vez implementado, requiere mantenimiento para corregir errores, actualizarlo y adaptarse a los cambios en las necesidades de la empresa.

Es importante tener en cuenta que el tiempo y los recursos necesarios para desarrollar un software personalizado varían dependiendo de la complejidad y del proyecto. No dudes en ponerte en contacto con Imagar, como consultoría informática especializada podemos estudiar tu caso y encontrar la solución adecuada para tu negocio, nos encargaremos también de su desarrollo y mantenimiento.